jueves, 5 de enero de 2012

Mi súper idea con botas mojadas


A veces en mi cabeza rondan cientos de ideas, y hoy mientras la luna medianamente se asomaba entre las nubes, salió Juana valiente, esa que muchas veces nadie ve. 
Dispuesta a todo decidí salir sin importar lo oscuro de la noche, el frío y las consecuencias de mi grandiosa idea, camine por los matorrales y me escondí atrás de ese feo árbol, hace mucho no te veo, pero ver la luz de tu cuarto me dio la fuerza para cometer una gran estupidez, toque por tu ventana pero mi Juana la valiente se fue, había quedado yo, la insegura, la que siente miedo, la que sobre todas las cosas te extraña. 
Muchas veces había pensado en hacer esto, escribir las cosas que pasan por mi cabeza, no creo tener talento así que sería raro saber de alguien que lea los pensamientos que plasmo, últimamente pienso mucho en ti, pero no es porque te quiera como antes, es porque eras mi estado común, siempre hay para supuestamente apoyarme, lo doloroso fue darme cuenta que simplemente no estabas hay para mi, sólo estabas conmigo para ti, y como tal vez  ahora ya no soy parte de tus deseos, ya no estás.
Escondidas Juana y yo, te vimos asustado mirando por la ventana, yo pensaba, bueno un momento en que por lo menos está pensando en mi, así no sepa que está hay por mi, pero luego ya eran más luces prendidas y más personas, asustadas, Juana valiente decidió salir corriendo y yo simplemente la seguí, no fui capaz de voltear a mirar, pero Juana decía que seguías hay, yo solo esperaba que no nos reconocieras, pues porque aunque contigo tal vez no tengo orgullo, esta vez si me hubieras visto no lo quería, es que no lo quiero reconocer, porque nuestro problema o mejor mi problema es que yo te quiero, yo estoy hay, yo te pienso, yo te extraño, yo te necesito.
Ya sentada en la entrada de mi casa, veo mis botas mojadas, en mi huida no me fije ni por donde pase, es lo mismo cuando estoy contigo, no me fijo en tus actitudes y es que es tan duro para mi aceptar el hecho de que yo no ocupo un lugar para ti, pero es que tus ojos me hacen dudar y me hacen pensar en esa vez, cuando dijiste que me adorabas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario